sábado, 11 de abril de 2009

Estado de Shock

En estos últimos días he recibido varios impactos (varios shocks) que me han conmocionado intrínsecamente en mis carnes. Paso a comentártelos, claro, porque guardármelos yo mismo, conmigo mismo, y con mi mecanismo, es un sinvivir; como tú comprenderás.
Primer shock:
Una pieza teatral; "Días de vino y rosas", que creo que ya comenté en otra entrada. Por fin la he visto.
Soberbia.
Es que no se me ocurre otro calificativo. Bueno, sí; podría decir "la hostia", pero no es lo mismo.
Y eso que el Lara es de esos teatros viejos, de olor a alcanfor y crujir de maderas castigadas. Y eso que yo tenía una columna a babor que amenazaba con darme la nochecita. Y eso que Silvia Abascal despertaba mis recelos (quizá es que me parezca demasiado mona, lo admito).
Bueno; pues a pesar de todo... Soberbia.
Tamzin Townsend ha hecho un magnífico trabajo, imprimiendo un ritmo constante y estable a la puesta en escena. Contribuye de manera dinámica a explotar la química que existe entre los dos actores. Te metes en su casa, en sus vidas, en sus miedos y en sus esperanzas.
Carmelo Gómez debe hacer más teatro. Tiene talento, presencia, voz y fuerza, aunque quizá le falte algo de empaque. Es un tipo enorme. Cuando desgrana su monólogo te pone los pelos de punta. Su llanto es llanto de verdad.
La Abascal es una grandísima actriz. Aunque muy tierna todavía. Me recuerda a Emma Suárez (que no sé por qué coño no hace más teatro). Está segura y tranquila, mira a los ojos y proyecta la voz sin miedo. Respira bien en escena, y aparca su vida a la entrada del teatro, lo que le permite tener gestos leves, sutiles, de calidad. Eso sí; debe romper la voz. Debe aparcar el tono engolado que la guía. Cuando aprenda a no hablar bien, quizá estemos ante otra María Guerrero.
Segundo shock:
Haciendo zapping por entre todas las cadenas que te ofrece la TDT, he descubierto un canal: VEO.
Que sí; que tiene de novedoso lo que las enaguas en pleno sur algodonero, pero que cuenta con algo que yo no había visto nunca. Te cuento:
He visto a un tipo, un metrosexual de libro, de pelo Pantene, barba a lo Orlando Bloom y voz de Toni Cantó, anunciando vibradores.
Te lo juro por Arturo.
O sea; tú ves a un pollo simpatiquísimo, monísimo y educadísimo, con un pedazo de dildo (de color azul, para más señas) en las manos, toqueteándolo y glosando sus excelencias, y debes permanecer impasible; ¿No?
Es que a mí me da mal rollo, qué quieres que te diga.
Que un vibrador no es lo mismo que cuarto y mitad de chopped. Amos, por Dios!!
Yo lo ví y busqué las cámaras, y a Almodóvar, en mi salón. Que sí, que era como estar dentro de "Mujeres al borde de un ataque de nervios", pongamos por caso.
Claro que yo no tengo gazpacho dopao.
Brrrrr...!!!
Tercer shock:
Sam Mendes (el de "American Beauty", el de "Camino a la perdición") aterriza en Madrid con su The Bridge Project. Un trabajo en el que pone en escena a Chéjov y a Shakespeare.
Ethan Hawke, Sinéad Cusack, Rebecca Hall y Simon Russell Beale camparán por el Español.
Joder, joder, joder. Qué bueno.
Tercer shock:
En Sony TV emiten "Will and Grace" que es, siempre con permiso de "Frasier", la mejor sit-com de la historia de la televisión. Bueno, pues: ¿Te puedes creer que es imposible encontrarla en DVD?
Que sí, que sí. Lo que yo te diga.
A ver; que han editado "Mi madre se comió a tu perro", por amor de Dios. ¡¡¡Que tienes toda la filmografía de Pajares y Esteso!!!
Chocao. Estoy chocao.
Porque, vamos a ver: ahora va a resultar que las niñas monas también son buenas actrices, que un trasunto de Brad Pitt puede anunciar penes de plástico sin despeinarse, que Madrid va a acabar siendo centro neurálgico del mejor teatro internacional y que, o pirateas o (y esto es dramático) te quedas sin catar lo bueno.
Chocao. Chocao estoy. Fíjate.

1 comentario: